Visitar Mallorca es símbolo de todo un estilo de vida, forjado con sus propios valores y que ha creado tendencia. Experimentar Mallorca es disfrutar de la esencia del mediterráneo y de las pequeñas cosas. Exploramos la comida, la cultura y el saber hacer mediterráneo, toda una filosofía de vida en la que los grandes protagonistas son las pequeñas cosas. Si se ha preguntado qué hacer en Mallorca, aquí le presentamos nuestra selección de qué experimentar y visitar en Mallorca.
DISFRUTAR DE MANJARES MALLORQUINES FRENTE AL MAR
Toda una oportunidad para practicar el slow life y disfrutar de Palma como slow city en los que los palmesanos pasean, charlan y disfrutan del entorno. Qué mejor que disfrutar de la gastronomía de la Isla frente al mar en uno de los sitios más populares como es el Portixol, antiguo pueblo pesquero de la ciudad, ubicado a pocos minutos de distancia desde el hotel boutique Posada Terra Santa.
O DE UNA PUESTA DE SOL
Inmortalizar el momento y capturar una puesta de sol en Playa De Es Trenc. La más hermosa de las playas con sus casi dos kilómetros de playa de arena blanca fundiéndose en el mar de aguas cristalinas y una impresionante gama de colores turquesa. Una playa virgen donde no existen ni sombras, ni edificios y desde donde vivir una puesta de sol es una experiencia mágica.
PERDERSE POR EL CASCO ANTIGUO
La ciudad de Palma es una ciudad que se puede recorrer a pie. Sus pequeñas y estrechas calles invitan a perderse en ellas y explorarlas con un tranquilo paseo. Dejarse maravillar por el casco antiguo del centro de la ciudad es sin duda una parada obligatoria. Palma esconde entre sus calles edificios únicos, monumentos y museos de distintas épocas que transportan hacia el pasado e invitan a sumergirse en su historia, sus leyendas y sus anécdotas.
SALIR A NAVEGAR
Nada mejor que experimentar el mediterráneo saliendo a navegar. Dejarse llevar en un paseo en barco, velero o catamarán. Un baño en el mediterráneo es de las mejores experiencias que disfrutar en la isla. Si hay una experiencia única e inolvidable, es el poder acceder a calas recónditas y dejarse llevar por la más pura esencia del mediterráneo.
COMER GAMBAS DE SÓLLER
Subirse al tren de soller e ir en busca de su famoso manjar rojo. La gamba fresca del Puerto de Sóller, que pescan a diario sus marineros, es el emblema gastronómico del puerto y de la isla. Se pueden comprar directamente de los pescadores y disfrutar de un ratito degustando la vida del puerto con vistas a la Serra de Tramuntana, todo un lujo para los cinco sentidos.
DÓNDE ALOJARSE
El centro histórico de Palma de Mallorca es, sin lugar a duda, una de las mejores zonas para alojarse en la isla. En ella, se encuentra uno de los secretos mejor guardados con más de 500 años de historia. El hotel boutique Posada Terra Santa es una belleza singular, oculta en medio de estrechas calles. Un oasis de calma y privacidad en pleno corazón de la ciudad, con habitaciones de lujo para un auténtico descanso señorial. Qué mejor opción que alojarse en el enclave perfecto desde donde evadirse y recorrer toda la isla.
Mallorca es vivir y emocionarse, es disfrutar el valor que tienen las pequeñas cosas: el sol, la playa y la montaña, la buena comida y la buena compañía. En Mallorca se encuentran todas estas pequeñas cosas y esperamos que esta selección le permita disfrutar del auténtico placer de vivir mediterráneamente.
